La percusión es uno de los métodos más antiguos de unificación de equipos. Al tocar a un mismo pulso, demostramos que nos estamos escuchando y nos sincronizamos como un solo ser.
En nuestra actividad de batucada, utilizamos este concepto antiguo y probado para reforzar el trabajo en equipo y la sensación de pertenencia, con resultados sorprendentemente efectivos.
Imagina a tu equipo creando música juntos, cada sonido de tambor será un latido del corazón del grupo. Las barreras se desmoronan, los roles se mezclan y la música emerge. No hay líderes ni seguidores, solo un colectivo de personas dedicadas a la creación de una melodía compartida.